Sensores de láminas frente a sensores de efecto Hall

Sensores de láminas frente a sensores de efecto Hall

Los sensores de efecto Hall también utilizan la presencia de fuerza magnética para accionar la apertura y el cierre de un interruptor, pero ahí terminan sus similitudes. Estos sensores son transductores semiconductores que producen un voltaje para activar interruptores de estado sólido en lugar de interruptores con partes móviles. Algunas otras diferencias clave entre los dos tipos de interruptores incluyen:

Durabilidad. Los sensores de efecto Hall pueden necesitar un embalaje adicional para protegerlos del medio ambiente, mientras que los sensores de láminas están protegidos dentro de contenedores herméticamente sellados. Sin embargo, dado que los sensores de láminas utilizan movimiento mecánico, son más susceptibles al desgaste.
Demanda de electricidad. Los interruptores de efecto Hall requieren un flujo constante de corriente. Los sensores Reed, por el contrario, sólo necesitan energía para generar un campo magnético de forma intermitente.
Vulnerabilidad a la interferencia. Los interruptores de láminas pueden ser propensos a sufrir golpes mecánicos en ciertos entornos, mientras que los interruptores de efecto Hall no lo son. Los interruptores de efecto Hall, por otro lado, son más susceptibles a las interferencias electromagnéticas (EMI).
Rango de frecuencia. Los sensores de efecto Hall se pueden utilizar en un rango de frecuencia más amplio, mientras que los sensores de láminas generalmente se limitan a aplicaciones con frecuencias inferiores a 10 kHz.
Costo. Ambos tipos de sensores son bastante rentables, pero en general los sensores de láminas son más baratos de producir, lo que hace que los sensores de efecto Hall sean algo más caros.
Condiciones térmicas. Los sensores de láminas funcionan mejor en temperaturas extremadamente frías o calientes, mientras que los sensores de efecto Hall tienden a experimentar problemas de rendimiento en temperaturas extremas.